No hay que volver de donde uno ya se fue No hay que mirar el camino para atrás Hay que seguir las señales del destino Porque se pierde mucho tiempo en el olvido Lo que no fue es porque no tenía que ser Y ese lugar me dio todo lo que me podía dar Yo seguiré remontando otros caminos El que no hace nunca se va a equivocar
Y jamás podrá saber, si hubiese sido lo que quiso ser.
Yo tropecé mil veces en mi andar Y más de una vez no me quise levantar Pero aprendí de los errores cometidos En el fracaso se encuentra un nuevo sentido
Y jamás me arrepentiré pues mi destino es el que yo forjé.